En un esfuerzo por garantizar la seguridad alimentaria, China ha puesto en marcha una nueva iniciativa para aumentar significativamente su producción de cereales en los próximos años. Según un plan de acción presentado por el Consejo de Estado, el país tiene como objetivo incrementar su capacidad de producción de cereales en más de 50 millones de toneladas para el año 2030. Esto implicaría un aumento en la superficie de cultivo de cereales, que se estima alcanzaría unos 1.75 mil millones de mu, equivalentes a 117 millones de hectáreas, con un rendimiento de grano por mu de 420 kilogramos.
A pesar de haber registrado una cosecha de cereales de más de 650 millones de toneladas durante nueve años consecutivos, con una proporción per cápita de 493 kilogramos, China reconoce la importancia de seguir fortaleciendo su producción de cereales. Según un funcionario de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (CNDR), el equilibrio entre la oferta y la demanda de cereales sigue siendo estrecho, y esta brecha podría ampliarse en el futuro, lo que subraya la urgencia de aumentar la producción para garantizar la seguridad alimentaria.
El plan establece que el maíz y la soja serán los principales contribuyentes al aumento de la producción de cereales, mientras que para el arroz y el trigo se enfatiza la mejora de la calidad y la optimización de la estructura. Además, se promoverá el cultivo de patatas y otros tipos de cereales y leguminosas de acuerdo con las condiciones locales.
Para llevar a cabo esta iniciativa, se implementarán importantes proyectos en 720 condados productores de granos cruciales. Estos proyectos incluirán desde la conservación del agua hasta la construcción de tierras agrícolas de alto nivel y la revitalización de la industria de semillas. Todo ello bajo la dirección conjunta de la CNDR y el Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales, con el objetivo de garantizar la seguridad alimentaria y fortalecer la autosuficiencia de China en materia de cereales.